La congelación de tejido testicular es una técnica experimental que puede ser una opción para los jóvenes (a partir de los 13 años) que deseen preservar su fertilidad antes de someterse a un tratamiento para el cáncer. Se extrae un pequeño fragmento de tejido de un testículo y luego se congela y almacena.
No se informaron nacimientos derivados de la congelación de tejido testicular.
En el futuro, es posible que los investigadores puedan producir esperma a partir de estas células en el laboratorio.